“La falta de sueño tiene impactos altamente nocivos en la salud, tanto física como mental. Hoy se sabe, por varias investigaciones, que si se sufre privación de sueño, se tiene un riesgo mucho más alto de padecer enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y depresión“.
De acuerdo con la World Association of Sleep Medicine (Asociación Mundial de Medicina del Sueño), “Dormir bien es uno de los tres pilares fundamentales para gozar de una buena salud, además de una dieta equilibrada y ejercicio regular”.
Asimismo, para el yoga, según Sivananda, los cinco principios fundamentales son:
· Ejercicio adecuado (asanas, posturas).
· Respiración adecuada (pranayama, control de la energía vital a través de la respiración).
· Dieta adecuada (vegetariana).
· Pensamiento positivo y meditación (dhyana).
· Relajación adecuada (savasana), en este último se encuentra el descanso apropiado, ya que savasana nos enseña como relajarnos.
Los tres elementos fundamentales para poder dormir bien son: la duración, la continuidad y la profundidad.
· Duración: la suficiente para que estemos descansados y alertas durante el día (entre 7 y 9 horas por día).
· Continuidad: deberíamos dormir sin interrupciones para que el sueño sea efectivo.
· Profundidad: el sueño debería ser lo suficientemente profundo para que sea restaurativo.
A continuación detallamos algunas formas en las que dormir mal, puede afectar la salud:
· Dormir mal puede llegar a ser causa de obesidad, ya que daña la regulación metabólica.
· Afecta a la salud mental, es como un círculo vicioso, ya que si la mente está perturbada no descansara apropiadamente y como resultado la falta de descanso creara desequilibrio.
· Menor rendimiento físico, es durante el sueño cuando se produce la regeneración de los tejidos corporales como mentales, si esto no se da, no hay una recuperación apropiada, lo que afecta el rendimiento físico y mental.
· Limita la capacidad cognitiva, tanto la falta de descanso como la mala calidad tienen un impacto importante en los procesos de memoria, aprendizaje y atención.
· Riesgo de sufrir accidentes, quizás ligado al ítem anterior, la falta de atención nos predispone a eventualidades.
· En los niños puede ser causa de bajo rendimiento escolar y niveles de agresión.
Debería ser natural acostarse por la noche, conciliar el sueño y levantarse recuperado al día siguiente, pero muchas personas manifiestan que les cuesta dormirse, se despiertan durante la noche o se levantan cansados, como si el sueño no hubiese cumplido su propósito. Esto es debido a que los pensamientos nos manipulan y al acostarnos no podemos detener la actividad de los mismos y ni siquiera nos damos cuenta de lo que sucede o, si nos dormimos, el cuerpo reposa, pero la mente no se detiene, de lo que resulta levantarse cansado como si no hubiéramos dormido lo necesario.
Yoga es una disciplina milenaria que comprende ejercicio físico, respiración y meditación, entre otras muchísimas técnicas que favorecen a vivir sano y en armonía, cuyo fin último es la iluminación. Se basa en el trabajo físico sincronizado con la respiración y el aprender a despojarse de los pensamientos masivos e inoportunos. El yoga es valorado como sistema de control para la salud física y mental, ya que dada la influencia que se supone, tienen los pensamientos, las emociones, sentimientos y actitudes en el organismo, interactúa de manera recíproca del cuerpo a la mente y de la mente al cuerpo. Hoy es indiscutido lo que el yoga aporta en beneficio de la salud física y mental del ser humano y es fácilmente comprobable después de un cierto período de práctica.
Consejos para un buen descanso nocturno:
· Practica yoga con regularidad (una práctica esporádica o irregular no te será de ayuda), posturas, respiración, relajación, meditación e introspección nos ayudan a centrarnos en nuestro interior, disipando preocupaciones que pueden estorbar el sueño.
· La comida de la noche debe estar basada en alimentos livianos, fáciles de digerir y poca cantidad, dejar pasar por lo menos dos horas antes de acostarse, todo depende de lo que se ingiera, pero hasta algo simple requiere de por lo menos una hora, una cena pesada pude tomar cuatro horas. Por lo tanto lo ideal son dos horas después de una comida liviana.
· Procura no mirar, escuchar o hablar de temas que desnaturalicen tu conciencia en las últimas horas del día, porque esto puede quedar como residuo en tu mente.
· Existen ciertas asanas y pranayamas que se pueden practicar antes de acostarse y ayudan a relajar los músculos y a descargar las tensiones del día.
· Antes de ir a dormir prepara tu habitación con un ambiente tenue y silencioso, colócate ropa cómoda y prepárate para liberar tensiones y disfrutar de un reparador descanso.
Te invitamos a comprobarlo practicando yoga!
